El invierno está en pleno apogeo, y nada mejor que rodearse de textiles que no solo aporten estilo, sino que también ofrezcan el confort y la calidez que necesitamos durante estos meses fríos.
Desde mantas suaves, edredones mullidos y sábanas calentitas hasta cojines aterciopelados que nos inviten a relajarnos en el sofá y disfrutar de la temporada.
Empecemos por los edredones, ese artículo tan de moda que salva nuestras noches de invierno. Lo que más nos gusta de ellos es que son esponjosos y muy gustosos, tanto su tejido exterior como su relleno están especialmente diseñados para hacerte sentir cálido hasta en los días más fríos.
La versatilidad de sus diseños también es un punto a tener en cuenta ya que las texturas con las que están confeccionadas le dan riqueza a tu dormitorio.
Las sábanas son una pieza importantísima en invierno ya que de ellas depende que nuestra temperatura sea óptima y pasemos una noche placentera. En nuestra web encontrarás tejidos cálidos como la franela y la coralina. Si eres muy friolero o no tienes calefacción hazte con un juego de sábanas de coralina. Si prefieres un nivel térmico más suave la franela será tu mejor aliado, te regalará transpirabilidad y abrigo noche tras noche.
No podemos acabar este post sin hablar de complementos: estos visten nuestros rincones, son ellos los que transforman nuestra casa en un hogar. Los cojines transmiten sensación de confort y estilo. Visualmente, añaden textura y color, creando contrastes que hacen que tu espació sea más dinámico.
Los plaids o mantas de sofá nos aportan tranquilidad, son ese abrazo que te envuelve en tus momentos de relax. Visualmente le dan un toque de suavidad al espacio. Dependiendo del color y el material, pueden aportar un aire relajante o añadir un toque de sofisticación.
En esta época buscaremos materiales que nos transmitan calidez y calma, por ello encontrarás tejidos aterciopelados, afelpados y de pelo, todos ellos muy adecuados para la estación.
Este enero, rodéate de lo mejor en confort para que tu casa sea el refugio perfecto en el que habitar hasta que llegue la primavera.